Tengo un amigo que se llama Sebastián, fue el rey de Afghanistan, es más chido que una mamada y tan suave como la chingada. Tiene un hermano barbudo que es terco pero no tarugo, su jefe tiene bigote y en la garganta tiene un chipote, la mama pinta en acuarela y tiene sueños de pasarela, también tiene una novia rebuena aunque namas la vi en una cena. Un día Sebas tuvo un problema, ya no se acordaba del lema que le había dictado su abuelo: 'Mi caballo es un lelo..'. La memoria no le servía, porque hasta ahí se sabía. Se puso a llorar, y luego a gritar, y su mama lo tuvo que consolar. Mejor la historia la despacho, porque no suena muy macho. Hay les va otra historia, en la que Sebastian peleo contra la escoria de los viejos banda. Sobre la banqueta en la que Sebastian anda se topo con unos viejos rudos y que lo metieron en muchos apuros porque le pegaron con sus bastones ¡se pasaron de cabrones! Le rompieron sus lentes y le tumbaron los dientes, luego en la cara le mearon y el dinero le quitaron, se trato de defender pero no podía contra el poder de los retirados ancianos... mejor ahí la dejamos, porque Sebas no suena muy valiente si un viejito es más fuerte. No recuerdo una historia en la que Sebastian no termine como escoria, así que tendrán que confiar en mí, aunque parezca que mentí, porque Sebastian esta cabrón, es super-ultra-mega chingón. (y es el de en medio de la foto)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario