La falta de internet en mi casa y un viaje me han mantenido fuera de la blogósfera, pero he vuelto, y conmigo el internet en mi casa, lo cual espero signifique mi regreso a la blog-normalidad (aunque se vea amenazada por trabajos finales).
Permítame contarles sobre mi viaje. Para celebrar sus 60 años, viajé con mi padre a Madrid para ver el clásico. No conocía Madrid, me encantó. Me pareció una ciudad hermosa, interesante y variada; una verdadera capital. Visité los tres museos importantes: El Prado, Reina Sofía y Thyssen, con exposiciones de Picasso, Goya y Modigliani, respectivamente. Goya, Picasso y Velázquez me dejaron muy impresionado, casi tonto. Tengo planeado hacer un post de cada uno en esta semana, ahora me quiero concentrar en los eventos alrededor del Real Madrid.
Llegamos el viernes, lo cual significa que nos tocó ver el partido del domingo contra Osasuna (por televisión) donde se coronaron campeones. Al terminar el partido fuimos a la Cibeles. Llegamos a las 12, nos catearon los policías y nos unimos a la enorme porra alrededor de la fuente, entre himnos y canciones, estuvimos esperando hasta las tres de la mañana. Me parecía demasiado, pero cuando aparecieron los campeones supe que valió la espera. Dieron una vuelta en un camión de dos pisos (estilo turibus) y luego Raúl cubrió la estatua con colores merengues. Nuestras piernas nos cobraron la espera el resto del viaje.
El miércoles llegamos un par de horas antes al Bernabeu. Le dimos unas vueltas y luego nos quedamos en una esquina donde supuestamente pasaría el camión con los jugadores. Mucha gente nos acompañaba. Para controlar no había muchos policias, sólo unos 6, pero estaban sentados sobre caballos. Cuando el camión apareció se pusieron a cabalgar por la calle, todos se abrieron. Recordé esa escena de Gladiador cuando el hijo de Russell Crowe es aplastado por caballería romana.
Se abrieron las puertas del estadio y me emocioné mucho. Precioso el Santiago, aun más lleno. Salieron a calentar los del Barca, yo, como todos, chiflé, pero muy adentro estaba gritando de emoción por ver a Messi, Henry, Dos Santos y demás sobre la cancha. Siguieron los del Madrid y se levantó el canto de Campeones, Campeones con toda la vehemencia que permite la garganta. Se fueron y regresaron para el pasillo. Comenzó el partido y presencié un fútbol que no conocía, de velocidad y pases exactos. Me gustó mucho poder ver jugar a Giovanni y, aunque no fue lo mejor, el Bojan de 17 años me gustó. Con respecto al Madrid, vi casi todos sus partidos de la temporada y no dudo que el que ví fue uno de sus mejores. Todos me dejaron muy impresionado. Raúl hizo un partido que merece estar en el Prado (más adelante entenderán el chiste), Robben haciendo recortes, Gago y Diarra recuperando todos los balones, Snjider y Guti repartiendo para todos, la defensa, con Sergio Ramos corriendo de un lado a otro, dejando a Henry y Messi callados. Realmente increíble. ¡Iiiiiker! ¡Iiiiiker! Higuain anota minutos después de entrar, Marcelo se echó unas corridas dignas de lateral brasileño y no faltaron las bicicletas de Robinho. Todo, todos.
Permítame contarles sobre mi viaje. Para celebrar sus 60 años, viajé con mi padre a Madrid para ver el clásico. No conocía Madrid, me encantó. Me pareció una ciudad hermosa, interesante y variada; una verdadera capital. Visité los tres museos importantes: El Prado, Reina Sofía y Thyssen, con exposiciones de Picasso, Goya y Modigliani, respectivamente. Goya, Picasso y Velázquez me dejaron muy impresionado, casi tonto. Tengo planeado hacer un post de cada uno en esta semana, ahora me quiero concentrar en los eventos alrededor del Real Madrid.
Llegamos el viernes, lo cual significa que nos tocó ver el partido del domingo contra Osasuna (por televisión) donde se coronaron campeones. Al terminar el partido fuimos a la Cibeles. Llegamos a las 12, nos catearon los policías y nos unimos a la enorme porra alrededor de la fuente, entre himnos y canciones, estuvimos esperando hasta las tres de la mañana. Me parecía demasiado, pero cuando aparecieron los campeones supe que valió la espera. Dieron una vuelta en un camión de dos pisos (estilo turibus) y luego Raúl cubrió la estatua con colores merengues. Nuestras piernas nos cobraron la espera el resto del viaje.
El miércoles llegamos un par de horas antes al Bernabeu. Le dimos unas vueltas y luego nos quedamos en una esquina donde supuestamente pasaría el camión con los jugadores. Mucha gente nos acompañaba. Para controlar no había muchos policias, sólo unos 6, pero estaban sentados sobre caballos. Cuando el camión apareció se pusieron a cabalgar por la calle, todos se abrieron. Recordé esa escena de Gladiador cuando el hijo de Russell Crowe es aplastado por caballería romana.
Se abrieron las puertas del estadio y me emocioné mucho. Precioso el Santiago, aun más lleno. Salieron a calentar los del Barca, yo, como todos, chiflé, pero muy adentro estaba gritando de emoción por ver a Messi, Henry, Dos Santos y demás sobre la cancha. Siguieron los del Madrid y se levantó el canto de Campeones, Campeones con toda la vehemencia que permite la garganta. Se fueron y regresaron para el pasillo. Comenzó el partido y presencié un fútbol que no conocía, de velocidad y pases exactos. Me gustó mucho poder ver jugar a Giovanni y, aunque no fue lo mejor, el Bojan de 17 años me gustó. Con respecto al Madrid, vi casi todos sus partidos de la temporada y no dudo que el que ví fue uno de sus mejores. Todos me dejaron muy impresionado. Raúl hizo un partido que merece estar en el Prado (más adelante entenderán el chiste), Robben haciendo recortes, Gago y Diarra recuperando todos los balones, Snjider y Guti repartiendo para todos, la defensa, con Sergio Ramos corriendo de un lado a otro, dejando a Henry y Messi callados. Realmente increíble. ¡Iiiiiker! ¡Iiiiiker! Higuain anota minutos después de entrar, Marcelo se echó unas corridas dignas de lateral brasileño y no faltaron las bicicletas de Robinho. Todo, todos.
7 comentarios:
Uuuy, emocionante el asunto. Yo cuando estuve por alla en prepa pude ir una sola vez al Bernabeu, cortesia del Twenty. Nos echamos el clasico tambien, y quedaron 1-1, cuando todavia jugaba Figo en el equipo merengue y Ronaldo era la contratacion flamante. Ronaldinho seguia en Paris, creo.
Gran estadio, no?
Los museos soberbios. La nueva ala del Prado esta bien padre, y recuerdo que el Thyssen me canso de la cantidad de cuadros que habia.
Ps felicidades por el viaje y por el excelente post.
Ah, y PRIMER COMMENT!!! jajajaja
yo quiero que las porras mexicanas sean como las de esos rumbos, o minimo las integrantes... jajaja. muchas gracias por regresar y por el libro
Deberías ser comentarista de fútbol, en verdad me transmitiste la emoción (y eso que no conozco a ningún jugador de los que dices)
Ese detallito de Raúl me sigue haciendo reir. Grande grande
se nota la emoción en tu post, jajaja lo de Raúl no tiene madre!!! bueno, muy bueno, jajajaja, sabes que no le voy al real, pero bueno, quien no quisiera ir a ver un partido así, en un estadio así??? envidiaaaaa!!!
muchos saludos ;) qué buen viaje!
Felicidades y bienvenido!
De mi se reían en París cuando Zizou recibía la roja del cabezazo porque me subí a un coche a gritar lo que le solemos gritar a los arbitros de acá. . .
ALLEZ LES BLEUS!
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