Ver que todas mis entradas son un video y, a veces, no más de 100 palabras me hace sentir mal. Los video los pongo siempre con la mejor intención: compartir; pero siento que una de las características del blog como medio de comunicación es poder compartir textos extensos. Si lo único que me interesara fuera compartir videos que me parecen peculiares, podría tener una cuenta de Twitter para eso y ya.
Pero bueno, hoy quiero escribir algo sobre el creador de manga Yoshihiro Tatsumi. Como siempre, (tal vez no tengo otra opción) quiero poner datos biográficos en mi entrada; en este caso no puedo, se lo atribuyo a la mala memoria. Igual puedo trabajar con algunas certezas: sé de la existencia de Tatsumi desde hace poco, máximo dos años; tengo los cinco libros que ha publicado la editorial Drawn & Quarterly y he leído cuatro de ellos; hace unos días me llegó y leí la más reciente de las cinco publicaciónes: Black Blizzard; Tatsumi es un verdadero maestro del manga. Woot. Con esta última frase acabo de crearme un espacio para una buena explayación biográfica (¿o de solipsismo? No sé, esa palabra está muy grande para mi cerebro).
Me gusta mucho leer comics (no se pongan de maméis, con es palabra inclyo al manga y 'novelas gráficas'). Pero no soy un lector prolífico, en el sentido de que no te manejo muchas series, etc. Digamos que soy un lector selectivo y fiel; quiero decir que tengo un par de series que sigo (The Last Call, Black Metal, Kurosagi Corpse Delivery Service, Hellboy), series que ya terminaron pero sé que releeré (Y: the Last Man, Akira) y, bueno, también está Alan Moore, para quien debería tener un librero aparte. A pesar de que faltan unos cuantos títulos y autores, mi lista de lectura, en comparación con el fan de comics o manga, es corta. Esto creo que lo explican dos puntos verdaderamente interesantísimos: los comics cuestan dinero; con lo que podrías usar para comprar un libro que te ofrezca una semana de lectura, consigues un comic que tal vez te dura dos días. Debo aclarar que no me gusta comprar números sino volúmenes y en inglés (porque puedo leerlo y las traducciónes para el manga son de gente con más callo, si pudiera leer en japonés los pediría de japón aunque tardaran medio año en llegar y cosataran el doble). Sé que esto se resolvería (aunque con esa palabra suena a que tengo un serio problema y la verdad es que estoy bastante feliz con mis lecturas) si bajara los comics del internet pero se juntan muchas cosas: en serio no aguanto leer mucho en esta pantalla, me gusta irme a leer a parques y cafés y nunca temo de que alguien me vaya a robar mi comic o algo malo le pasé, con una laptop sí y, finalmente, siento que un archivo de computadora no es algo que le pueda heredar a mi hij@ o a una biblioteca. No me quiero ver alternativo, mamón o ponerme en contra de los eBooks (de hecho bajar comics a un eBook ya sería otra cosa) pero en serio no me late lo de verlos en mi computadora; de hecho he tratado de leer dos mangas en mangafox.com y, a pesar de que son muy buenos, los dejé de leer. El otro punto (casi olvido que son dos) es que me siento muy defraudado cuando un comic me aburre o se vuelve predecible o es tonto y es por eso que trato de andar con mucho cuidado cuando escojo qué leer.
¡Yoshihiro Tatsumi! Este post es sobre ti, perdón que me tenga que soltar tanta introducción.
Como ya dije, tengo cinco volúmenes de su obra. Tres son compilaciónes de su obra en diferentes años: 1969, 1970 y 1971-2. El contenido son historias cortas, las cuales publicaba en cualquier revista que se las aceptara. Las historias son notas rojas: abortos, asesinatos, fetiches, vicios, etc. Al final de cada volumen viene una entrevista con Tatsumi y en una de ellas admite que, por lo menos en ese entonces, no leía manga, sólo periódicos, de los cuales se inspiraba. Aparte de que las historias son capaces de satisfacer cualquier cantidad de morbo, están contadas de una manera que yo juzgo inigualable. Tatsumi es un maestro (lo repito). Tomando en cuenta de que no soy ningún erudito del manga, creo que mi comentario es válido por la siguiente razón: las narraciónes de Tatsumi no se basan en el diálogo (de hecho hay muy poco diálogo) ni en las imágenes, todo se desarrolla gracias a un balance de ambos recursos, un logro que en cualquier esquina del género (sea manga, cómic, etc.) es difícil de encontrar. Son historias que no caen el lo sentimental, que se presentan de manera directa y objetiva al lector y que, si uno llega con las ganas de, sirven como testimonio de la cultura japonesa que se empezó a formar despúes de que cayeron las dos bombas y el emperador dejó de ser divino.
La otra obra de Tatsumi que compré hace un año se llama A Drifting Life. No la he leído, debo confesar. ¿Por qué? Por que es un manga de poco más de 800 páginas, una obra autobiográfica, un bildungsroman (para mamonear) que quiero leer con la mayor tranquilidad y paciencia que es posible, por lo tanto, está en mi lista de 'leer-una-vez-terminada-la-tesina'. Escribiré sobre ella una vez que la lea, igual me pareció importante mencionarla aquí.
La obra que acabo de leer (con eso me refiero a cuando comenzé a escribir este post, hoy que lo subo me parece que es una semana después de leer) se llama Black Blizzard. En la contraportada lo describen como un noir thriller y quién soy yo para estar en desacuerdo. Un dato histórico: cuando se publicó BB el negocio del manga en japón era el siguiente: había bibliotecas de manga (aunque bibliotecas puede implicar que no era un negocio, imagínense un Videocentro de manga) y Yoshihiro Tatsumi escribió esta historia para que la pudieran rentar. Tiene 127 páginas y está impresio en un papel que, yo supongo, trata de imitar el papel en el que se imprimió originalmente BB. Debo admitir que ni la historia ni los dibujos me parecieron la gran cosa; una vez que uno como lector recuerda que la obra tiene más de 50 años y que Tatsumi tenía 21 cuando la escribió, se descubren cosas nuevas. Por ejemplo que Tatsumi no tenpia un talento nato para dibujar; si uno compara los dibujos de BB con los que aparecen en la antología de historias de 1969 resulta evidente que Tatsumi desarrolló su estilo con el tiempo (y supongo que en A Drifting Life ya es algo natural).
Al final de Black Blizzard aparece una breve entrevista que el editor Adrian Tomine (AT) le hace a Yoshihiro Tatsumi sobre su obra:
AT: Looking back at Black Blizzard now, how do you feel about it?
YT: I feel nostalgic about the past, for the days of my youth. At the same time, bringing this work out as a book now is like exposing something shameful and private from my past that I'd rather keep hidden from sight—so I have conflicting feelings about it.
AT: I think, as always, you judge your own work far too harshly, and I'm very grateful that you've allowed us to publish this book.
YT: Thank you for the warm support and cooperation you always give me whenever one of my books is published.
Escogí esta parte de la entrevista porque se relaciona con la lectura que le di a Black Blizzard y también porque atestigua que la obra de Tatsumi está ganando nuevos lectores a causa de que está editorial está publicando su trabajo.
(si suponen que el de la foto es él, suponen bien)
2 comentarios:
crap, mi choro está más extenso que lo que digo sobre Tatsumi, creo que eso habla mal de moi.
too long, did not read
Nah ya en serio, la conclusion logica a todo esto es que me los prestes
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