Vaya si es Domingo. Hace unos años los domingos siempre venían acompañados de un periodo de desasosiego y no podía hacer otra cosa más que aguantarlo y esperar que pase. Hoy me despierto de forma similar, casi desorientado, casi perdido. Tal vez no dormí bien o tengo que desayunar, mas todo me pesa. Lo curioso es que acuda a mi blog para comenzar el día, publicar sobre esto que (espero) cuando se me pase podré verlo con algo de distancia. Similar a un diario, aunque es clara la diferencia entre un blog y un diario. La necesidad de compartir, de estar en contacto con otras personas, otras voces. Curioso. Pero, bueno, voy a tratar de comenzar el día. Abrazo.
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3 comentarios:
chale, yo también tengo un serio problema con los domingos y hay varios posts en mis blogs sobre lo mismo... pero bueno, ánimo, se acaban, y hay varios días antes de regresar a otro domingo... hay que inventar algo para los domingos... saludines ;)
Para mí los domingos siempre han tenido un color sepia, un aburrimiento infinito y un sentimiento de desesperación de no poder terminar todo lo que es para mañana.
Hace mil años habia un programa en la tele que pasaba los domingos por la tarde; cuando uno escuchaba su musiquita el cerebro te traicionaba recordandote todos los detalles de tu tarea que te habia escobdido desde el viernes y tenias que recortar las enciclopedias para sustituir las monografias y, por supuesto, usar pasta de dientes en vez de pegamento porque no estabas preparado.
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